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Los propietarios de casas saben la necesidad de revisar ciertas cosas periódicamente por toda su casa para asegurar de que funcionen de manera adecuada. Cuesta menos cuidar temprano lo que requiere mantenimiento que esperar hasta que ya no trabaje.
Las listas de verificación son útiles porque reducen el esfuerzo para saber lo qué se debe hacer. Por lo general, son concisos y proporcionan suficiente información para completar la tarea. Estas tareas se aplican a la mayoría de los propietarios de viviendas, pero de ninguna manera es una lista completa.
- Aspire el escape del secador: no solo afecta la eficiencia de su secadora en sí, sino también la acumulación de la pelusa que junto con el aire caliente crea un peligro de incendio.
- Reemplazca los filtros del sistema de climatización (HVAC) antes de cada temporada: localice el filtro, tome nota del tamaño y mantenga reemplazos disponibles. Apague la unidad, abra la puerta o la carcasa, retire el filtro sucio y reemplácelo por el nuevo. Preste atención a la dirección del flujo de aire; los filtros están marcados para indicar la dirección correcta.
- Pruebe todos los cortacircuitos GFCI: los interruptores GFCI, así como los enchufes/tomacorrientes, tienen un botón de prueba. Al presionar el botón, se activa el disyuntor, apagando la corriente de todo el circuito. Para restablecer el interruptor, presionelo completamente para apagarlo y luego devuelvalo para volver a encenderlo.
- Aspire las bobinas del refrigerador: las bobinas en los refrigeradores se pueden encontrar en diferentes lugares dependiendo del fabricante y del modelo. Localice las bobinas y limpie la suciedad y el polvo con un cepillo de cerdas suaves o una aspiradora con cepillo.
- Reemplazca las baterías en los detectores de humo: los detectores de humo deben probarse frecuentemente presionando el botón de prueba y las baterías deben ser reemplazadas anualmente, incluso si parecen aún tener vida. Después de reemplazar las baterías, pruebe el detector de humo para asegurar que está funcionando.
- Revise las ventanas y las puertas en busca de fugas: hay varias maneras de verificar si hay fugas. Una es sosteniendo una mano a unos centímetros del marco de la ventana o de la puerta durante un día frío para sentir las corrientes de aire. Otra es encendiendo una vela y trazar el contorno de la ventana o de la puerta para ver si la llama o el humo tiran en una dirección, lo cual indica una fuga de aire.
- Inspeccione todas las estaciones del sistema de rociadores (sprinklers) para ver si los cabezales tienen fugas o necesitan ajustes: encienda cada una de las estaciones manualmente e inspeccione cada rociador para ver si tiene fugas o si está cubriendo adecuadamente el área prevista.
- Revise el abridor de la puerta del garaje para asegurar que sigan puestas las medidas de seguridad: coloque una caja de cartón en línea con uno de los sensores antes de intentar cerrar la puerta. La puerta debe invertir su dirección al detectar la obstrucción.
- Revise y limpie la(s) chimenea(s) anualmente, si se usa(n): esta es una tarea para un profesional, pero es posible reconocer los indicadores de que la chimenea necesita limpieza. Estas incluyen evidencia de aves u otros animales, un olor a fogata, humo que entra dentro de la habitación, dificultad en encender o mantener un fuego en marcha, marcas aceitosas en las paredes de la chimenea, o el tiro es negro con hollín y creosota. La frecuencia de uso de las chimeneas de leña afecta la necesidad de limpieza.